experimentar

En Món Sant Benet tenemos infinitas razones para exprimir las experiencias. El arte de vivir el momento, resolver inquietudes, sorprendernos, ilusionarnos con la mirada nueva de quien observa por primera vez, dejarnos llevar por la emoción que nos deja sin aire, nos nubla la mirada y nos eriza la piel.

Somos adictos a la adrenalina que provoca ese instante mágico que, sabemos, construirá un recuerdo único y para siempre.

Una copa de vino con vistas al monasterio de Sant Benet, una sesión de yoga en el jardín aromático de nuestro Hotel Món, una visita sensorial por las paredes de nuestro monasterio, un recorrido en bicicleta por nuestro entorno o una matinal en familia descubriendo cómo transformar los alimentos del huerto en una comida saludable.

Desde Món Sant Benet podemos explicar con detalle lo que hacemos y cómo lo hacemos, pensando en quien viene solo, acompañado, con su equipo de trabajo o en familia.

Pero, las palabras muchas veces no acaban de hacer justicia a las sensaciones. Lo que se palpa, lo que se siente. Aquella risa que lo llena todo. Aquellas campanas que rompen el silencio y que nos ocupan de paz. Aquel cristal que refleja primavera.

Món Sant Benet no se puede explicar. Es experiencia. Hay que vivirlo.